Estos hongos se transmiten por contacto directo y conviven con nosotros
sin producir infección, hasta que ciertos factores la favorecen como:
- El envejecimiento. A lo largo de los años acumulamos más cantidad de hongos que colonizan el pie, y las defensas de nuestro cuerpo son más débiles.
- Mantener el pie húmedo.
Pasos a seguir
1- Buscar un pequeño recipiente en donde pueda introducir los pies.
2- Calienta un poco el agua y, cuando esté tibia, vértela en el interior del cuenco que has elegido junto al vinagre blanco.
3- Después, introduce los pies o el pie afectado por los
hongos, en esta mezcla y deja que reposen dentro durante unos 10 minutos.
5- Pasado ese tiempo, retira los pies del agua con vinagre y luego
secarlos muy bien. Recuerda que, si tus uñas quedan húmedas, no solo no
arreglarás el problema, sino que, además, empeorarás el estado de los hongos.
6- Pon en práctica este truco de belleza todos los días hasta que los hongos hayan
desaparecido.
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